En la actualidad cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2019), indican que anualmente cerca de 800 mil personas se quitan la vida. Lo que señala que el tema de la salud mental, es un punto de mejora continua. En el Perú, más de 5 millones de personas sufren algún tipo de trastorno y el 80% no recibe atención profesional, tal como lo indican las cifras del Instituto Nacional de Salud Mental (2019).
Entre los principales contextos donde se puede desarrollar o presentar algún problema de salud mental, es en la familia, escuela y el trabajo. Pero ¿Por qué se considera al trabajo? Al ser uno de los lugares donde las personas pasan el mayor tiempo posible, el trabajo puede contribuir a la Salud Mental de las personas al darles mayor sentido en la vida. Pero, si el ambiente laboral es inadecuado puede generar repercusiones negativas no solo en la productividad del trabajador, sino también en su salud mental. Además, según la Organización Internacional del Trabajo indica que, en el ámbito laboral, muchas dificultades mentales, están frecuentemente asociada al estrés.
A menudo existe cierta confusión entre presión y estrés. De hecho, las exigencias del entorno laboral hacen inevitable que existe presión en el trabajo. Pero, nos referimos al estrés cuando se presenta una presión excesiva o difícil de controlar, ya que, puede perjudicar la salud de los empleados y los resultados de su empresa. Es decir, el estrés laboral es la reacción que puede tener el individuo ante las exigencias y presiones laborales que no se ajustan a sus conocimientos y capacidades, desencadenando problemas físicos y psicológicos tales como enfermedades y patologías; problemas motores y cognitivos; trastornos variados desde inmunológicos hasta sexuales y trastornos psicológicos graves que en ocasiones pueden llevar al suicidio.
Por eso, el Estado Peruano frente a estos escenarios decidió promulgar en Mayo del 2019 la Ley N° 30947 Ley de Salud Mental, cuya reglamentación N° 007-2020-SA comenzó a regir en Marzo del 2020, teniendo como objetivo garantizar el acceso a los servicios de promoción, prevención, tratamiento y rehabilitación, como condiciones para el pleno derecho a la salud y el bienestar de la persona. Incluyendo al entorno laboral como ámbito de aplicación para esa ley.
Aún más considerando el nuevo contexto originado por la pandemia del Sars- cov2 conocido también como Covid 19. Sea que se trabaje de manera convencional o haciendo trabajo remoto, ambas situaciones pueden insertar una serie de emociones abrumadoras en los trabajadores, generando desde estrés, agotamiento emocional y otros problemas mentales, lo que afectaría la eficacia y productividad en las organizaciones.
Sin embargo, un correcto abordaje puede prevenir y evitar problemas de salud en los colaboradores y en la empresa tales como el absentismo laboral, la rotación del personal, la disminución del rendimiento y de la productividad. Estas acciones pueden estar relacionadas con el monitoreo de riesgos psicosociales, en el marco del cumplimiento de la Ley N° 29783, Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo y su Reglamento aprobado por Decreto Supremo N° 005-2012-TR. Por lo tanto, es importante que las empresas implementen planes anuales de salud mental y promuevan un clima organizacional a favor de sus trabajadores, de acuerdo a los lineamientos establecidos legalmente por el estado peruano, lo que puede incluir actividades como cuidado del personal, planes de reconocimientos y logros para mejorar el bienestar, empoderar al personal, insertar prácticas de buen trato y vida libre de violencia, brindar abordaje del agotamiento profesional y capacitación laboral en competencias socioemocionales. Sin duda, vale la pena tomarse unos minutos para informarse sobre el tema, ya que, nos ayudara a mejorar las condiciones de trabajo y la calidad de vida laboral.